1.- El primer árbol fue producto de una colaboración de los obreros:  En 1931 los obreros -de ascendencia italiana en su gran mayoría- que estaban a cargo de la construcción del Rockefeller Center, decidieron hacer una colecta para adquirir un abeto de 6 metros de alto, que fue decorado con adornos fabricados por sus propias familias. Esta iniciativa fue el origen de una de las tradiciones más entrañables de la Navidad en Nueva York.  

2.- El primer encendido oficial se realizo en 1933: La administración del Rockefeller Center decidió realizar la primera ceremonia de encendido de árbol en 1933, esta se vez se instaló un abeto de 15 metros de altura. Fue tanto el éxito y la masiva concurrencia, que en 1936 y muy cerca del lugar donde se instaló el árbol se construyó una pista de patinaje en el hielo, y que hoy es uno de los lugares más concurridos durante el invierno en Nueva York.

3.- La Segunda Guerra Mundial no impidió que se armara el árbol: A pesar que la guerra obligó a los norteamericanos a "ajustarse los cinturones", el Rockefeller Center no dejó de armar el árbol durante Navidad, pero durante se trató no de un gigantesco abeto, sino de tres árboles pequeños, que a pesar de lo modestos fueron todo un símbolo de esperanza durante esos años tan difíciles, ya que cada uno estaba decorado con luces verdes, azules y rojas. 

 4.- El encendido del árbol se transmitió por primera vez en 1951: Al inicio de la década de los cincuenta el éxito del árbol de Navidad del Rockefeller ya era toda una institución y se decidió buscar árboles más altos y espectaculares que para poderlos armar se empezó a utilizar grandes andamios, en un proceso que se extendía por nueve días y en donde trabajaban 20 personas. Tanta era la expectativa que en diciembre de 1951 se transmitió por primera vez la ceremonia del encendido del árbol a través de la señal de NBC.

5.- En 1969 aparecieron los ángeles en los jardines: La escultora inglesa Valerie Clarebout (1910-1982) diseñó los ángeles que adornan los jardines del Rockefeller Center y que como el árbol son un símbolo clásico de la Navidad. Ella diseñó 12 ángeles utilizando 75 metros lineales de metal. Valerie falleció en 1982 a la edad de 74 años pero dejó un maravilloso legado que hasta hoy perdura.   

6.- El árbol llegó en barco: En 1977, debido a la ubicación original del árbol y las dimensiones, se tuvo que traer en un barco que navegó por el rio Hudson, hasta llegar a la isla de Manhattan y de allí se trasladó hasta el Rockefeller Center.​

7.- Casi 20 años después el árbol llegó en avión: En 1998 un árbol proveniente de  Richfield, Ohio, voló a la ciudad de Nueva York en el que por ese momento era el avión más grande del mundo, un Anatov An-124 Ruslan. 

8.- El más grande: En 1999 se instaló en el Rockefeller Center el árbol más grande de estos casi 100 años de historia. Se trataba de un abeto de 30 metros de altura, proveniente de Killingworth, Connecticut. 

9.- En memoria de las víctimas del 11 de Septiembre: En memoria de las víctimas de los atentados en el World Trade Center, el árbol de la Navidad del 2001 se decoró con luces blancas, rojas y azules. Millones llegaron a visitar el árbol como señal de respeto a las víctimas, ya que por ese momento la zona de la tragedia estaba totalmente cerrada y bloqueada.

10.- Una estrella de cristales de Swarovski: En el 2004 la llamada "Estrella de Swarovski" decoró la parte más alta del árbol de Navidad. La idea se gestó a inicios del 2004 y fue realizada por el artista Michael Hammers-1965 que utilizó 25 cristales, para crear un artefacto que brillaba esplendorosamente desde lo alto. La estrella de Hammers se utilizó hasta el 2008 y ha ido cambiando.

11.- La estrella de Daniel Libeskind: En el 2018 el afamado arquitecto Daniel Libeskind-1946, diseñó una nueva estrella realizada con tres millones de cristales Swarovski decoró la parte más alta del árbol de Navidad que medía 21 metros. Además de los cristales la estrella tenía 70 puntas y pesaba 450 kilos.  

12.- El árbol del 2022: La historia de este árbol ha sido fascinante y este año la espectacularidad no es la excepción. Se trata de un árbol que es un abeto noruego de 24 metros de altura y que pesa 14 toneladas. Se calcula que el árbol tiene una edad entre 85 y 90 años y se trajo desde Queensbury, Nueva York. El árbol este año tiene más de medio millón de luces LED que extendidas llegan a medir 8 kilómetros. 

La instalación del árbol no ha sido cosa fácil, llegó a Nueva York el 12 de noviembre y la  ceremonia de encendido se realizó el 30 de noviembre y estará en el Rockefeller Center hasta el 6 de diciembre. Vale la pena verlo.