Popeyes decidió dar el gran paso y entrar en el Reino Unido para competir de tú a tú con KFC, que tiene más de 900 restaurantes en operación y una posición de liderazgo en la categoría. Popeyes está dispuesto a sorprender con su pollo de Louisiana y su hoy muy famoso “Signature Chicken Sandwich”.
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Popeyes ingresará al difícil mercado de Reino Unido este año. Finalmente el pollo típico de Lousiana decidió tomar “al toro por las astas”, y entrar con fuerza a un mercado que históricamente ha sido liderado por KFC desde el ya lejano 1965 y también por la muy popular marca Nando´s creada en Sudáfrica, donde hoy en el Reino Unido opera más de 300 restaurantes.
Popeyes entrará a los dominios de la Reina Isabel no de manera tímida y “estilo laboratorio”, sino con un plan muy agresivo en el que pretende abrir 350 ubicaciones durante los próximos cinco años; empezando en Londres donde planean abrir el “flagship” de la marca.
El ingreso de Popeyes en el Reino Unido es parte de un plan global diseñado por la marca para lograr una sólida presencia en Europa, continente donde en la actualidad ya tiene operaciones en España, Suiza y Turquía, que para Popeyes también es parte de la región Europa.
Para la marca del pollo frito no es una novedad operar fuera de Estados Unidos, puesto que hoy ya tiene más 3,400 locales en 29 países y planea una expansión muy agresiva en China, país donde abrió su primer restaurante en mayo del año pasado.
Aparentemente la marca ha tenido una aceptación inimaginable en “el país de Confucio”, y a pesar que hoy ya existen más de 6,600 restaurantes de KFC; Popeyes está dispuesto a dar la pelea y es que en un mercado tan grande con más de 1,3billones de chinos, hay espacio para todos.
Popeyes fue fundado en Louisiana en 1972 y es el resultado del emprendedor Al Copeland (1944-2008); que vio en la cocina y sabores de su natal New Orleans una oportunidad para crear restaurante de pollo frito que tuvo tanta aceptación que para 1976 ya había otorgado las primeras franquicias y que en los siguientes diez años ya tenía 500 restaurantes en funcionamiento.
Evidentemente la marca en estos años ha tenido altas y bajas, ya que competir con KFC en algunos mercados no ha sido cosa fácil; pero desde el lanzamiento de su “Signature Chicken Sandwich”, un sandwich que está preparado con tiernas pechugas de pollo marinadas y sazonadas con especies secretas, las cosas han empezado a mejorar y este producto se ha convertido literalmente en el producto bandera de la marca, generando en muchos países y principalmente Estados Unidos la llamada “Guerra del Sandwich de Pollo”.
David Shear president de Restaurants Brands International RBI quien también es propietaria de Burger King y Tim Hortons, ha señalado: “Estamos muy emocionados con llevar nuestra marca al Reino Unido y que nuestros amigos británicos disfruten del auténtico pollo frito de Louisiana”.
A pesar de lo complicado que fue el 2020, Popeyes abrió en Estados Unidos 132 nuevos restaurantes -que no es poco- tomando en cuenta la actual coyuntura mundial y está a la búsqueda de nuevos socios internacionales para seguir creciendo, por lo que con seguridad escucharemos mucho de Popeyes en los próximos años y es que la marca no está dispuesta a bajar la cabeza frente al poderío mundial de KFC y lo enfrentará con calidad, innovación y principalmente mucho pero mucho sabor.
Observaremos muy de cerca el crecimiento de Popeyes en Reino Unido y estamos seguros que pondrán todo el empeño del mundo para conquistar el mismísimo paladar de la Reina Isabel y toda su familia.
