Hay un antes y un después para Manolo Blahnik desde su aparición en la serie y las películas de Sex and the City; y es que el personaje principal; Carrie Bradshaw, se encargó de aproximar la marca a un segmento que no la conocía y que hoy cae rendido a los pies de este fabuloso diseñador español.
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A finales de la década de los noventa Manolo Blahnik-1942, ya tenía una larga trayectoria como diseñador de calzado femenino, pero la realidad era que solo era conocido por un muy selecto grupo que consumía sus exclusivas creaciones con devoción, básicamente actrices, celebridades, princesas y reinas; era famoso pero no tenía la notoriedad que hoy tiene; pero en 1998 las cosas para Blahnik cambiaron para siempre y se lo debe básicamente a Carrie Bradshaw, el personaje de ficción de la serie Sex & the City (1998-2004), interpretado por Sarah Jessica Parker-1965, que en la serie tenía una fascinación por los zapatos y en especial por los de este genial diseñador español.
Carrie Bradshaw recorrió las principales calles de Nueva York durante los siete años que duró la serie enfundada en zapatos de taco alto de las mas icónicas marcas, pero principalmente en diseños de Manolo Blahnik, al cual inclusive la serie dedica un capítulo completo (A Woman´s right to shoes-Temporada 6-2003) y la lleva al climax cuando en la escena más importante de la película inspirada en la serie Sex and The City (2008), Mr. Big, le declara su amor no con un tradicional anillo de diamantes, sino con un par de "pumps" azules de seda con un broche de plata y piedras, convirtiéndolos en uno de los más icónicos zapatos del mundo.
La serie y las dos películas aproximaron a Manolo Blahnik al común de los mortales y de pronto, como si se tratara de magia, mujeres que no estaban en la lista del "mercado objetivo típico de Blahnik" empezaron a comprar la marca, ya que si Carrie Bradshaw que en la serie no era millonaria, ni una celebridad, sino una chica joven con mucho estilo, que vivía de su trabajo como escritora, podía comprarlos; porque no cualquier otra chica del mundo real parecida a ella; y así Manolo Blahnik pasó a ser el secreto mejor guardado de "ricos y famosos" para convertirse en una marca de lujo, accesible a cualquier mujer que estuviera dispuesta a hacer un esfuerzo, ahorrar unos meses y comprarse un par de zapatos, antes reservados para un muy pequeño grupo.
El fenómeno televisivo que generó en el mundo la serie Sex and the City, evidentemente disparó las ventas de Blahnik al cielo y agotó las existencias de los modelos que Carrie Bradshaw lucía en la serie, al punto que las clientes debían anotarse en una lista para poder comprar por ejemplo los emblemáticos zapatos azules, los "peep toe" plateados o las sandalias del capítulo en el cual Carrie es asaltada (What goes around comes around-Temporada 3-2000).
Si bien la serie Sex and The City globalizó la marca a partir de 1998, Manolo Blahnik ya tenía una gran trayectoria. Blahnik originario de España, se mudó a Londres a finales de los sesenta para probar suerte en el mundo de la moda, inicialmente como diseñador de modas.
Manolo conoce en París a Paloma Picasso-1949, de quien se hizo muy cercano, ello lo presentó a Diana Vreeland (1903-1989) por esa época la directora de la edición de Vogue norteamericana y una mujer en constante búsqueda de talentos, que luego de entrevistarse con el diseñador en Nueva York le aconsejó se olvidara del diseño de modas y se concentrara en el diseño de zapatos. Blahnik abrió una pequeña tienda en Chelsea en Londres y desde allí poco a poco se hizo de una muy exclusiva clientela. A finales de los setenta Manolo Blahnik ya vendía sus zapatos en Nueva York a través de Bloomingdale’s la exclusiva Tienda Departamental.
Blahnik le debe de alguna manera a la serie y las películas la globalización, ya que sus zapatos estuvieron presentes en muchos de los momentos claves de las aventuras y desventuras de Carrie Bradshaw en busca del amor en "la gran Manzana".
Patricia Fields-1942, encargada del vestuario de la serie, creó para el personaje principal un "look" donde los zapatos eran la pieza fundamental; no hubo capítulo en el que no quedara claro que zapatos llevaba puestos Carrie y la verdad es que lució todas las marcas, desde Christian Louboutin hasta Dior, pero sin lugar a dudas fue Manolo Blahnik la preferida, la cual es mencionada hasta en 16 oportunidades y no sólo mencionada, la marca es parte central de la trama en tres episodios: "What comes around goes around", Temporada 3, "A Vogue Idea" Temporada 4, y "A Woman´s right to shoes" Temporada 6,
Y esto no quedaría allí... sino que los zapatos de Manolo Blahnik fueron la mejor idea de los guionistas para sellar el compromiso entre Carrie y Mr. Big durante la película del 2008. La inspiración detrás de estos zapatos cuenta Blahnik, le vino de cuadros de Napoleón Bonaparte (1769-1821), y su esposa, Josefina (1796-1810), que solían usar zapatos con broches, algo que él re inventó el diseñador, añadiendo detalles en pedrería con el broche cuadrado que los zapatos llevan al frente. Fabricados en seda azul, además de convertirse en el equivalente al anillo de matrimonio de Carrie Bradshaw, fue su "algo azul" cuando se casó con Mr. Big en el ayuntamiento, de la ciudad de Nueva York.
Así pues esta escena con los icónicos zapatos azules llevó a Blahnik a todos los rincones del mundo y donde la marca se volvió tan conocida como Louis Vuitton o Chanel. Evidentemente no todas las mujeres del mundo podrán comprar un par de zapatos de Blahnik, pero la escena representa lo importante que es este accesorio en la creación de una imagen personal; donde la marca es el "súmmum" al cual una mujer puede aspirar.
Cada vez que Manolo Blahnik pone su cabeza en la almohada con seguridad debe dedicar unos minutos para agradecer por la suerte que tuvo con el hecho que Carrie Bradshaw se atravesara en su vida y si bien nada de esto hubiera sucedido de no tener Blahnik el increíble talento que tiene, Sex and the City le dio un "empujón" que ya quisiera cualquier marca recibir.